Durante las últimas seis décadas y en diversos continentes, Sesión en una tarde de lluvia, la extraordinaria novela de Mark McShane, ha venido teniendo numerosas adaptaciones, tanto al cine como a la ópera y a la radio. ¿Cuál es el atractivo de esta historia que sigue fascinando una y otra vez en sus distintas versiones?
Myrna Savage, una mujer con poderes extrasensoriales, se gana mediocremente la vida como médium en Londres. Si bien las dos o tres sesiones por semana que realiza en su casa le alcanzan para sobrevivir, quiere trascender, ganar fama en el campo de lo paranormal y volverse una espiritista célebre. Busca entonces alcanzar la gloria a través de un crimen: junto a su marido secuestran a la hija de un millonario y mandan una carta de rescate. Apenas el caso llega a la primera plana de los diarios, Myrna visita a los padres y les promete encontrar a la niña sirviéndose de sus poderes telepáticos: imagina así demostrarle al mundo la grandeza de sus dones.
La simplicidad aparente de esta obra maestra esconde la silenciosa eficacia de una trama perfecta, donde hasta los actos cotidianos parecen revestidos de un trasfondo siniestro. Diáfana, veloz, la novela avanza con determinación, entonada por una voz que no se permite temblar ni frente a hechos conmovedores o escalofriantes. Dueño de un estilo despojado, McShane sorprende por una gran agudeza perceptiva; su deslumbrante sentido del ritmo hace que la intensidad narrativa jamás decaiga. Sesión en una tarde de lluvia es habitualmente recordada por tener uno de los desenlaces más admirables de la literatura.
“No conozco una novela que combine mejor el suspenso con lo sobrenatural”.
Anthony Boucher
Mark McShane (1929-2013) nació en Australia pero se educó en Lancashire, Inglaterra. De padres gitanos, viajó durante sus primeras tres décadas por todo el mundo para al fin establecerse en Mallorca, isla donde vivió hasta su muerte.
En 1960 escribió su primera novela, The Straight and Crooked. McShane fue el creador de un tipo especial de suspenso sobrenatural y usó un seudónimo, Marc Lovell, para explorar ese género con una serie de parodias de espionaje con su espía Appleton Porter, personaje altísimo y que habla dieciocho idiomas. Esa serie incluye The Spy Game, The Spy with his Head in the Clouds y Apple Spy in the Sky, que fue filmada por Burt Kennedy con Donald Sutherland como Porter.
Con Sesión en una tarde de lluvia McShane alcanzó una celebridad que hubiera sido la envidia de la propia protagonista de la novela, Myrna Savage. Poco después de la publicación del libro, Bryan Forbes la llevó al cine, modificando varios detalles argumentales. La película, con extraordinarias actuaciones de Kim Stanley y Richard Attenborough, no tuvo gran éxito en el momento del estreno, pero con el tiempo terminó volviéndose de culto.
Stephen Schwartz hizo su versión del libro para la ópera y hubo también una adaptación para la radio, emitida por primera vez en la BBC Radio 4. En el 2000 Kiyoshi Kurosawa filmó Sesión en Japón. Y finalmente, en 2021, el talentoso Tomas Alfredson compró de nuevo los derechos para cine de la obra maestra de McShane: Rachel Weisz será Myrna.
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